He ido a Berlín, he dado unas vueltas y he regresado. En una semana da tiempo a muchas cosas menos a aburrirse. En una semana todo parece bonito, acogedor, mejor...
En todos los viajes siempre recuerdas este tipo de cosas, todo lo demás, lo que aparece en los libros y que todo el mundo sabe (o puede aprender) casi pasa desapercibido entre las miles de sensaciones que transmite cada centímetro de suelo, a cada paso algo nuevo que siempre me deja un deseo escrito en la mente: "Quiero volver".
Lo vi casi todo, día tras días, paso a paso, metro a metro:
- Vi un metro de muro dentro de una tienda,
- a Papá Noel subido en una bicicleta cerca de la Ciudadela de Postdam,
- vi gente bebiendo por todas partes y no era un botellón (o macroborregón),
- sentí mis oídos estallar al subir los más de 200 metros de la torre de televisión en un torpedo llamado ascensor,
- estuve en la puerta del museo de Los Ramones,
- creí morir subiendo los 285 escalones en espiral de la Siegessäule y al llegar arriba me sentí como la mismísima,
- no sé cómo acabé hablando serbocroata, alemán, italiano, inglés, castellano, francés y lengua de signos en una misma conversación y sin saber ni la mitad de los idiomas,
- compré tabaco en el supermercado (a 3,80€ el paquete de Camel), (sí, volví a fumar, recaída le llaman),
- canté la "primavera trompetera" en el vagón de un metro camino a Charlottenburg.
- vi un oso panda en el zoo de Berlín; no puedo decir que me gustara verlo ahí, ni al panda ni al resto de animales que miraban con ojos aburridos y tristes al infinito.
- Me vi cara a cara con Nefertiti que se conserva como ninguna,
- me sentí grande en lo alto del altar de Pérgamo.
- El mejor culo de Berlín lo vi en un museo...
- Vi un metro de muro dentro de una tienda,
- a Papá Noel subido en una bicicleta cerca de la Ciudadela de Postdam,
- vi gente bebiendo por todas partes y no era un botellón (o macroborregón),
- sentí mis oídos estallar al subir los más de 200 metros de la torre de televisión en un torpedo llamado ascensor,
- estuve en la puerta del museo de Los Ramones,

- creí morir subiendo los 285 escalones en espiral de la Siegessäule y al llegar arriba me sentí como la mismísima,
- no sé cómo acabé hablando serbocroata, alemán, italiano, inglés, castellano, francés y lengua de signos en una misma conversación y sin saber ni la mitad de los idiomas,
- compré tabaco en el supermercado (a 3,80€ el paquete de Camel), (sí, volví a fumar, recaída le llaman),
- canté la "primavera trompetera" en el vagón de un metro camino a Charlottenburg.
- vi un oso panda en el zoo de Berlín; no puedo decir que me gustara verlo ahí, ni al panda ni al resto de animales que miraban con ojos aburridos y tristes al infinito.
- Me vi cara a cara con Nefertiti que se conserva como ninguna,
- me sentí grande en lo alto del altar de Pérgamo.
- El mejor culo de Berlín lo vi en un museo...
En todos los viajes siempre recuerdas este tipo de cosas, todo lo demás, lo que aparece en los libros y que todo el mundo sabe (o puede aprender) casi pasa desapercibido entre las miles de sensaciones que transmite cada centímetro de suelo, a cada paso algo nuevo que siempre me deja un deseo escrito en la mente: "Quiero volver".
9 comentarios al respecto:
Vaya!! últimamente sois muchos los ke salís de viaje, ke envidiaaaaa!! Me encanta que transmitas todas estas sensaciones, gracias por compartirlas :D
Kiss!!
Yo tb kiero irme de viaje!!! Q envidia!!!!!!
Por cierto con kien fuiste??? Con los aburridos???
Besotes
Yo estuve en Berlín hace unos 18 años y una de las pocas cosas que recuerdo era una fachada enorme que la habián pintado con un manojo de cinco o seis globos de colores como esos que llevan los vendedores de globos,me habria gustado más que en el dibujo los globos hubieran estado sueltos y volando por el aire pero también era bonito como lo habían hecho. Siempre esta bién darle un poco de fantasia a las ciudades.
la verdad es que los blogeros os pasais el dia de viajecitos! yo que apensa voy de mi ciudad a madrid y vuelta a lo mismo, que envidia me das. un saludillo maja!!
¡Guau! ¡Qué de cosas! Me gusta esos metros de muro dentro de la tienda !! Y las otras cosas. Qué guay.
Una de mis asignaturas pendientes es no conocer mundo. Cuando leo estos posts de viajes se me enciende el piloto de necesidad imperiosa de conocer.
Todo estupendo, sobre todo lo de Nefertiti, mira que tengo ganas de echármela en cara. Lo único malo y te voy a echar la charla es: ¿qué es eso de volver a fumar, eh? Muy mal muy mal.
Besotes gordotes.
Pero chiquillaaaaa,cuando vas a actualizar???estas mas perraca que yo,jajaja,un besazo.
Bueeeeno,hoy toy que lo regalo...mandame un mail a boymadrid69@yahoo.es y te cuento quien soy jejeje...
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